Cada tercer domingo de noviembre, el mundo se une para recordar a quienes perdieron la vida en siniestros viales y para acompañar a sus familias, que conviven con un dolor irreparable. El Día Mundial en Recuerdo a las Víctimas de Tránsito no es solo una fecha en el calendario: es un llamado urgente a reflexionar, a cambiar hábitos y a reforzar el compromiso colectivo con la seguridad vial.
Esta jornada fue instaurada por la ONU con el objetivo de visibilizar la magnitud de la tragedia vial a nivel global. Cada año, millones de personas resultan heridas o fallecen en hechos que, en la mayoría de los casos, podrían haberse evitado. Detrás de cada número hay historias truncas, proyectos que quedaron inconclusos y familias que deben reconstruirse emocionalmente.
En Argentina, organizaciones de familiares, fuerzas de seguridad, municipios y entidades civiles realizan diversas actividades: encendido de velas, misas, murales, charlas de concientización y campañas en redes. Todas ellas buscan transmitir un mensaje claro: la seguridad vial es responsabilidad de todos.
Factores que debemos cambiar
La mayoría de los siniestros de tránsito están asociados a conductas evitables, como:
Exceso de velocidad
Manejo bajo los efectos del alcohol o drogas
Distracciones al volante (uso del celular)
Falta de uso del casco o cinturón de seguridad
Maniobras imprudentes
Adoptar hábitos seguros es una forma de honrar la memoria de quienes ya no están y de proteger a quienes aún compartimos las calles y rutas.
Un compromiso que salva vidas
Recordar a las víctimas es también reafirmar el compromiso con políticas públicas, controles efectivos y educación vial desde la infancia. Cada gesto cuenta: respetar un semáforo, ceder el paso, manejar con responsabilidad o decidir no conducir si consumimos alcohol.
Este tercer domingo de noviembre, hagamos una pausa para reflexionar.
Por quienes partieron, por quienes sobrevivieron y por quienes todos los días salen a la calle con la esperanza de volver a casa.
Día Mundial en Recuerdo a las Víctimas de Tránsito
Un llamado a la conciencia y a la responsabilidad