Durante el rodaje de Twister (Tornado) 1996, los actores Helen Hunt y Bill Paxton fueron apuntados con enormes ventiladores industriales para simular el paso de los tornados. ¡Nada fue generado por computadora en esas escenas! De hecho, muchas veces terminaban cubiertos de tierra y polvo después de cada toma.

El equipo de producción utilizó tecnología de vanguardia para la época, pero lo impresionante es que la mayoría de los efectos se hicieron de forma práctica. Por ejemplo, los autos volando y las casas destruyéndose fueron construcciones reales manipuladas con cables y grúas. Incluso usaron hielo seco y potentes máquinas de viento para lograr el ambiente de tormenta perfecta.

El calor, el ruido y las condiciones del set no fueron fáciles para nadie. Al final, todo el esfuerzo valió la pena: Twister se convirtió en un fenómeno de taquilla y en una película de culto para los amantes de los desastres naturales en el cine.